viernes, 29 de agosto de 2014

ESCOJO EL ANONIMATO

Estamos convencidos de que la humildad, expresada por el anonimato, es la mayor protección que Alcohólicos Anónimos jamás pueda tener.
— DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 182-3
Ya que en A.A. no hay reglas, yo me sitúo donde más me conviene, así es que escojo el anonimato. Quiero que mi Dios me utilice a mí, humildemente, como uno de sus instrumentos en este programa. El sacrificio es el arte de dar de mí generosamente, permitiendo que la humildad reemplace a mi ego. Con sobriedad, yo reprimo el deseo de gritar al mundo, “yo soy miembro de A.A.” y experimento alegría y paz interior. Permito que la gente vea los cambios en mí y espero que ellos me pregunten qué me sucedió. Pongo los principios de espiritualidad antes de juzgar, de buscar faltas y de criticar. Quiero amor y cariño en mi grupo para poder desarrollarme.
GRUPO PARTE VIEJA DONOSTIA - SAN SEBASTIAN