viernes, 2 de enero de 2015

PRIMERO, LOS CIMIENTOS

¿Es la sobriedad todo lo que podemos esperar tener de un despertar espiritual? No, la sobriedad no es sino el mero comienzo.
— COMO LO VE BILL, p. 8
Practicar el programa de A.A. es como construir una casa. Primero tuve que poner una capa grande y gruesa de concreto sobre la cual erigir la casa; para mí, eso correspondió a dejar de beber. Pero es muy incómodo vivir desprotegido en una capa de concreto, expuesto al calor, al frío, al viento y a la lluvia. Así que construí un cuarto sobre la base empezando a practicar el programa. El primer cuarto era un poco tambaleante porque yo no estaba acostumbrado al trabajo. Pero con el paso del tiempo, según iba practicando el programa, aprendí a construir mejores cuartos. Mientras más practicaba y más construía, más confortable y feliz era la casa que tenía, la casa en que vivo ahora.
GRUPO PARTE VIEJA DONOSTIA - SAN SEBASTIAN